Un pobre 25% de rendimiento tiene al equipo dirigido por Pablo Abraham en el fondo de la tabla del clausura, acumulando 5 derrotas en condición de visita. La última fue frente a Palestino el 23 de noviembre.
¿Ha visto alguno de los partidos últimos 9 partidos “jugados”? Nuevamente una fiel copia; el abuso del pelotazo por el centro, esperando un milagro permita que ante la marca de 2 o más, Vázquez logre llegar al gol.
“Errores defensivos puntuales” (¿Hola Fernando Diaz?) cuestan el partido una vez más.
Al minuto 29, Lucas Simón remata desde la entrada del área con gran complicidad de Adán Vergara (Dejavú) el cual se voltea y el balón da en el pié, que le cambia la dirección a Giovini. Gol y partido.
En la semana las declaraciones a la prensa iban dirigidas a que se jugaría con la “desesperación” de Huachipato, pero en la cancha otro equipo fue el que se vio tras el balón y forzando errores.
Hay un universo entre el paso de la defensa y la delantera que sumó a Miguel Angel Alba y Sebastián Varas en el segundo tiempo, nada se pudo hacer contra el colista del campeonato.
Hoy por hoy, solo Lucas salva las lucas.
El partido pasado se vio con mucho dominio de posiciones, jugadores y táctica a Victor Merello en el Nelson Oyarzún. ¿Se viene un NUEVO corte en la dirección técnica?.
Manden un WhatsApp a Miami y avisen que Ñublense está en el fondo de la tabla, ni cerca de jugar y mucho menos de alcanzar la posición #6 como pretendían.
